Entre pena y satisfacción es lo que siento al ir acabando cosas. Hay algunos productos que se te hacen eternos y otros que desearías que no se acabasen nunca (más que nada por lo que pica lo que cuestan!). Pero lo que más rabia me da es acabar un producto que me encanta y que encima lo han dejado de fabricar >.<
Entre los productos que os enseño hoy me despido de uno que ha sido un gran favorito y que no volverá a mi tocador por haber sido retirado...